
A menudo yo comparo el yoga con la música.
Cualquier persona puede sacar las notas básicas en cualquier instrumento musical.
Pero NADIE PUEDE APRENDER A TOCAR BIEN SIN AÑOS DE ESTUDIOS Y PRÁCTICA.
Y es que las notas son sólo 7.
Pero hay UN NÚMERO INFINITO DE VARIACIONES en sus composiciones.
Lo mismo pasa en el yoga.
Dependiendo de cómo construyes una secuencia de poses, consigues uno u otro efecto.
El proceso es muy complejo.
NO es solo una cuestión de compensar el efecto de la postura anterior.
Ojalá fuera tan fácil.
El impacto de los ejercicios de yoga tiene múltiples facetas.
Y sucede NO SÓLO a nivel de músculos y articulaciones, sino también provoca cambios hormonales y proporciona una gran influencia sobre el sistema nervioso.
Cada practicante con experiencia se dará cuenta que “obtener la música» en la práctica de yoga no es tan fácil como parece.
Siempre digo que, antes de empezar, hay que saber ¿QUE ES LO QUE QUIERES conseguir al final?
Una “recarga” de energía?
Relajar la mente?
Mejorar la calidad del sueño?
Bajar de peso?
Aumentar la flexibilidad de las articulaciones?
Entrenar la fuerza muscular?
Todos estos ejemplos implican diferentes enfoques de la práctica.
Vamos a verlo punto por punto, pero sin entrar en muchos detalles, para no hacer este artículo pesado e interminable 🙂
La «RECARGA» DE ENERGIA:
¿Qué es en realidad?
A nivel fisiológico, esto significa la activación de la parte SIMPÁTICA del sistema nervioso autónomo.
Es el que aumenta la producción de adrenalina por las glándulas suprarrenales.
¿Cómo se puede lograr con la ayuda de yoga?
En primer lugar, REDUCIENDO LA CANTIDAD DE ASANAS INVERTIDOS, los que casi siempre activan su “antagonista “ el PARASIMPÁTICO, el responsable de descanso y relajación.
Y centrarse en la CORRECTA ejecución de las INCLINACIONES HACIA ATRÁS, pero no todos, sino sólo aquellos que están acompañadas por la tensión de los músculos de la espalda.
En segundo lugar, realizar prácticas de respiración SIN alargar las ESPIRACIONES.
En mi curso «Aprende a gestionar tus biorritmos para sentirte más joven, fuerte y enérgico.» explico en detalle cómo con ayuda de respiración casi de inmediato se puede cambiar «el interruptor» del sistema autónomo al modo SIMPÁTICO o PARASIMPÁTICO.
También tener en cuenta LA HORA DEL DÍA, porque si quieres mejorar tu salud, en lugar de exacerbar los problemas existentes, tienes que favorecer las condiciones adecuadas para el mantenimiento del equilibrio neuro-vegetativo.
¿Qué es y por qué es tan importante?
Lo explico en mi curso gratuito «Cómo conseguir una vida más larga sin problemas de salud.»
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RELAJAR LA MENTE, MEJORAR LA CALIDAD DEL SUEÑO:
Para llegar a estos objetivos hay que activar el PARASIMPATICO.
Por lo tanto, es mejor llevar a cabo este tipo de prácticas POR LAS TARDES.
AUMENTAR EL NÚMERO DE POSTURAS INVERTIDAS y ESTIRAMIENTOS ESTÁTICOS.
Aunque también hay «matices».
Por ejemplo, los fisiólogos saben una curiosa propiedad del sistema nervioso autónomo, la que algunos la llaman «el efecto de péndulo».
Consiste en que CUANTO MÁS ACTIVES UNA PARTE, por ejemplo el simpático, después de un tiempo MÁS SE ACTIVA LA OTRA, el parasimpático en nuestro caso.
Y viceversa.
Tales características fisiológicas pueden ser utilizadas con éxito en las prácticas de yoga.
ADELGAZAR:
Escribí un libro sobre este tema:
AUMENTAR LA FLEXIBILIDAD DE LAS ARTICULACIONES:
Créeme, lograr una mayor flexibilidad después de los 20 años no es tan fácil. 😐
Aparte del hecho de que CADA PERSONA TIENE SU LONGITUD y ELASTICIDAD de los tejidos conectivos, también existe el factor de la edad.
Cuando el cuerpo deja de crecer y produce menores cantidades de la hormona de crecimiento (somatotropina) en el cuerpo comienzan a ocurrir procesos irreversibles.
En este caso, nos interesan los cambios del colágeno, una proteína muy importante.
Con la edad sus moléculas se «fusionan» entre sí, reduciendo la elasticidad de tejidos hasta 20-30% después de los 30 años.
Por lo tanto, si tienes más de 30, debes ser muy cuidadoso con los ejercicios de estiramiento.
Y tener en cuenta que para lograr el mejor resultado, debes RELAJAR tus músculos ÁNTES DE ESTIRAR, o sea, activar el PARASIMPÁTICO.
Por lo tanto, lo mejor es realizar la practica POR LAS TARDES, haciendo hincapié en los asanas estáticos y aumentar el número de invertidos.
ENTRENAR FUERZA MUSCULAR:
Ya sé, la mayoría de las personas poco informadas, asocian el yoga sólo con relajación.
Sin embargo, como ex alumna de diferentes escuelas y estilos, puedo decir que las clases de yoga pueden ser muy intensas y difíciles incluso para un atleta o gimnasta entrenado .
Sí, con el yoga es posible entrenar la fuerza muscular.
La práctica en este caso tiene que ser más dinámica.
Las inclinaciones hacía atrás ayudarán a producir más adrenalina, necesaria para el trabajo muscular.
Y, por supuesto, la hora del día es importante.
Si lo practicas POR LA MAÑANA, el porcentaje de los ejercicios de fuerza y relajación puede ser 70:30.
Y POR LA TARDE, después del “sacudido adrenalinico” SIEMPRE hay que activar el PARASIMPATICO. Esto Significa una proporción 50:50.
Por cierto, en mi curso «Aprende a gestionar tus biorritmos para sentirte más joven, fuerte y enérgico.» también explico al detalle la situación, cuáles podrían ser las consecuencias negativas y cómo evitarlas, cuando los atletas o los aficionados al deporte entrenan por las tardes.

«Mi objetivo es AYUDARTE a
ADQUIRIR CONSCIENCIA sobre el
VALOR REAL DE LA SALUD.»
Lana Védas.
Creadora Método on-line Cronobioyoga.
Muchas gracias muy interesante y constructiva tu explicación me ayuda mucho a darle ese nuevo enfoque al yoga